lunes, 27 de septiembre de 2010

Querido papá

Todas sabemos que uno de los momentos más emocionantes de una boda (si no el que más) es la entrada de la novia a la iglesia del brazo de su padre. Para todo padre y madre es un orgullo que su hija se case, pero para un padre llevar a su hija al altar es un momento muy especial y emotivo cargado de significado.
El padre de la novia ejerce un papel muy importante durante ese día, ya que se convierte en el padrino de la novia (que no en padrino de boda, que es normalmente el hermano o amigo del novio que le entrega el ramo y le lee el poema). Es el encargado de entregar simbólicamente a su hija a su futuro marido en el altar y esta presente junto a su hija durante toda la ceremonia en un lugar privilegiado junto a su hija.
Durante la consagración del matrimonio, la novia puede hacer partícipe a su padre pidiendo la venia (no todo el mundo lo hace) es decir “el permiso o aprobación” del padre a esa unión. Es un gesto precioso y respetuoso, que consiste simplemente en girarte un poco y mirar a tu padre con una sonrisa.
El padre de la novia también es de gran ayuda en los momentos previos a la ceremonia, ya que es la única persona que está junto a la novia en esos minutos y ayuda a calmar los nervios, ahuecar el vestido y la ayuda normalmente a salir del coche (momento en el que se captan fotografías preciosas!).
Este momento... ¡pelos de punta!
A la hora del baile, algunas novias deciden abrir el baile con un vals con su padre. A nosotras nos gusta más que los novios sean los que abren el baile, pero está bien después poner un segundo vals en el que se unan los padres de los novios y en un momento dado se cambian las parejas y la novia se coloca con su padre, la madrina con el novio y el padre del novio y la madre de la novia bailan juntos.

La figura del padre es súper especial en el día de tu boda, estará a tu lado en todo momento y felicísimo por tu nueva vida… aunque no neguemos que un poco triste si se ponen cuando se dan cuenta de que su niña se marcha a otra familia, la suya propia.

¿Cómo estuvo vuestro padre el día de vuestra boda? ¿Tranquilo, nervioso, atacado? ¿Nos podéis contar alguna anécdota?

Bisous!

4 comentarios:

  1. Ay...q momentos taaaaan magicos vives camino de la iglesia con tu padre (o quien te acompañe), justo antes de q nos abrieran la puerta para entrar a la iglesia mi padre me dijo: No sabes lo feliz q soy ahora mismo...
    Y yo me quedé sin palabras...

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  2. yo todavia no me he casado, pero seguro q mi padre estara hecho un flan, nervioso por la boda y triste porque su pequeña al fin se va...maider.

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  3. Mi padre se portó como en campeón. Estuvo super divertido (como siempre) durante todo el día en casa para que nadie se atacase demasiado y cuando me acompañaba al altar, estaba que no cabia por la puerta de orgullo.
    Yo sí le pedí la venia a mi padre antes del "Si quiero" Se lo había divho de siempre, pero no esperaba que me acordara, así que se sintió super orgulloso. ¡No cabia en la silla de orgullo!

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  4. Supongo que todas decimos lo mismo... ¡mi padre es el mejor padre del mundo! Qué bonito el "viaje" a la iglesia. Uno de mis hermanos conduciendo, mi madre en el asiento del copiloto y mi padre conmigo detrás agarrándome la mano. Yo no iba nerviosa, iba emocionada!
    La entrada a la iglesia y el beso que le dí a mi padre nada más llegar al altar, antes de colocarme junto al novio. Le encantó y sabía que en ese momento era el beso de cada una de las cuatro hijas a las que ya ha llevado al altar (yo soy la última). Y finalmente la apertura del bals con él. ¡Ese momento no me quería perder y mi marido estuvo de acuerdo desde el principio!
    ¡Querido papá, qué grande eres!

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